Generales Escuchar artículo

Tierra del Fuego busca blindar el empleo tras la eliminación de aranceles a celulares importados

El gobernador Gustavo Melella firmará un acuerdo con empresas y sindicatos para preservar los puestos laborales, mientras los gremios evalúan medidas de protesta a escala nacional.

Tierra del Fuego busca blindar el empleo tras la eliminación de aranceles a celulares importados

El gobernador Gustavo Melella firmará un acuerdo con empresas y sindicatos para preservar los puestos laborales, mientras los gremios evalúan medidas de protesta a escala nacional.

Por la decisión del gobierno nacional de eliminar los aranceles a la importación de teléfonos móviles, el mandatario fueguino, Gustavo Melella, anunció la firma de un convenio tripartito destinado a proteger la estabilidad laboral en el sector industrial de la provincia. El acuerdo, que se rubricará durante la tarde, involucra al Estado provincial, las empresas y los representantes de los trabajadores, con el objetivo de evitar despidos.

Melella, en declaraciones a Radio 10, subrayó la importancia de formalizar el compromiso asumido por las compañías de mantener la planta laboral. "Si manifestaron públicamente que van a conservar los empleos, que lo ratifiquen con su firma", expresó el gobernador, en un tono que combinó firmeza con ironía.

El anuncio se produce luego de un masivo paro de 24 horas que paralizó más del 90% de la actividad productiva en Tierra del Fuego, en rechazo a la política económica del Ejecutivo nacional. Melella defendió el rol estratégico de la industria local, destacando su capacidad tecnológica y su inserción en el mercado global. "Aquí no se fabrican artículos triviales; hay un elevado desarrollo, procesos de ensamblaje, valor agregado y producción para marcas líderes. Muchas críticas surgen desde el desconocimiento o la mala fe", argumentó.

Soberanía y reclamo político

El mandatario fue más allá al vincular la industria fueguina con la defensa de la soberanía nacional, cuestionando la falta de una visión estratégica por parte de las autoridades centrales. "Mientras otras naciones —como Inglaterra, Chile o Estados Unidos— comprenden la importancia geopolítica del Atlántico Sur y la Antártida, nosotros seguimos dando vueltas sin resolver lo esencial", afirmó con dureza.

En esa línea, acusó al gobierno de priorizar intereses externos sobre los nacionales. "Es un golpe a la soberanía, sin duda. Mientras otros aprenden de sus aliados, nosotros repetimos errores que debilitan nuestra posición", sostuvo.

Los sindicatos no descartan escalar las protestas

Desde el ámbito gremial, Oscar Martínez, dirigente de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de Río Grande, respaldó las medidas de fuerza y adelantó que evalúan extender la resistencia a nivel federal. "Actuamos con firmeza ante un gobierno autoritario que responde a mandatos del FMI. Nuestra prioridad es defender los puestos de trabajo", afirmó en diálogo con El Destape Radio.

Martínez confirmó que analizan articular un plan de lucha coordinado con otras organizaciones sindicales, aunque aclaró que cualquier acción dependerá de la evolución del conflicto. "No descartamos nada; lo crucial es garantizar que nadie quede en la calle", concluyó.

La situación en Tierra del Fuego refleja un choque entre dos modelos económicos: uno que apuesta a la protección de la industria local y otro que impulsa la liberalización de importaciones. Mientras el gobierno provincial intenta amortiguar el impacto social, los trabajadores se preparan para una batalla que, advierten, podría trascender las fronteras de la isla.

Comentarios
Volver arriba