
Federico Greve: "La mitad del presupuesto fueguino se destina a asistencia social"
El legislador de Forja advirtió sobre la crisis económica, defendió el rol del Estado provincial y criticó la ausencia del Gobierno Nacional.
En una extensa entrevista con FM La Isla, el legislador Federico Greve (Forja) advirtió que el 50% del presupuesto de Tierra del Fuego se destina a asistencia social, y apuntó con dureza al Gobierno Nacional por la falta de previsibilidad económica. En sus palabras: “Estamos frente a dos programas de gobierno completamente distintos: uno que desfinancia salud, educación y jubilaciones, y otro que, con recursos limitados, hace lo posible por sostener a quienes más lo necesitan”.
Greve explicó que el armado del presupuesto provincial se vuelve casi una apuesta a ciegas: “Es futurología pura. El Ministerio de Economía de la provincia tiene que estimar lo que va a hacer la Nación. No se puede proyectar sin conocer el valor del dólar o las metas macroeconómicas”, sostuvo. Y agregó que esta dificultad debería corregirse con una reforma constitucional que permita planificar de forma más realista.
El legislador fue contundente al marcar prioridades: “La asistencia social se comió el desarrollo”, sentenció. Aunque admitió que no puede dar números exactos, estimó que la mitad del presupuesto fueguino se destina a programas de contención social, como subsidios al alquiler, ayuda alimentaria y cobertura de servicios esenciales.
En ese sentido, remarcó que el Estado provincial ha tenido que absorber responsabilidades que antes cubría la Nación. Un ejemplo claro es el Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID): “Hoy el FONID tiene presupuesto cero a nivel nacional. La provincia lo paga con recursos propios. Es como financiar una municipalidad entera”, graficó.
Más allá de los números, Greve apuntó contra el modelo de Estado ausente que promueve el Gobierno Nacional: “No creemos en la antipolítica. Creemos en un Estado que garantice derechos. Aunque cueste, aunque falte, es la única herramienta que tenemos para mejorar la vida de los vecinos”, sostuvo.
Consultado por el panorama electoral, reconoció que hay un fuerte malestar social: “La gente está enojada, pero no con un dirigente. Está enojada con todos. Con el sistema. Y tiene razón”. En ese marco, hizo hincapié en la necesidad de trabajar en educación cívica ante la implementación de la boleta única, una novedad que podría provocar confusión: “Muchos no saben qué es. Podrían votar sin querer en blanco. Hay que salir a explicar y enseñar”.
Cerrando, Greve definió la campaña que se avecina como un proceso de escucha más que de promesas: “Ya no alcanza con hablar. Hay que escuchar. Y sobre todo, no prometer lo que no se puede cumplir”.